Las micropipetas de volumen variable son el instrumento de precisión ideal para las necesidades de medición de líquidos en laboratorios de análisis clínicos y de control de calidad. Una micropipeta es un dispositivo de laboratorio empleado para absorber y transferir pequeños volúmenes de líquidos.
Los volúmenes captables por estos instrumentos varían según el modelo y tipo de pipeta: los más habituales, denominados p20, p200 y p1000, admiten un máximo de 20, 200 y 1000 μl, respectivamente. Es de destacar que el uso de micropipetas permite emplear distintos líquidos sin tener que lavar el aparato: para ello, se emplean puntas desechables, de plástico, que habitualmente son estériles.
¿Cómo elegir la micropipeta adecuada?
Las características del fluido y la precisión requerida en los volúmenes de líquidos transferidos en microlitros (µL) son factores clave para elegir una micropipeta. También es importante considerar la experticia del operador y la ergonomía. Los aspectos que influyen en la selección del equipamiento idóneo pueden resumirse de la siguiente manera:
- Propiedades fisicas del liquido
En un laboratorio, hay tres categorías principales de líquidos: acuosos, viscosos y volátiles. Esto dicta el tipo de micropipeta necesaria, entre dos segmentos disponibles: micropipetas de desplazamiento de aire o micropipetas de desplazamiento positivo. Una micropipeta de desplazamiento de aire es la ideal para el manejo de líquidos acuosos, mientras que una pipeta de desplazamiento positivo es la opción a considerar para fluidos viscosos o volátiles.
- Precisión
Se recomienda elegir siempre la pipeta de laboratorio de menor capacidad acorde a los volúmenes para la mayoría de procedimientos requeridos, ya que la precisión disminuirá cuando el volumen transferido esté muy cerca a la capacidad mínima de la pipeta. Si se manejan 50 µL en una pipeta de 5.000 µL de capacidad, por ejemplo, se obtendrán resultados de baja calidad. Es decir que la precisión será muy limitada, tomando en cuenta qué es un microlitro.
- Ergonomía
Es preferible elegir una micropipeta liviana, con un centro de masa equilibrado que asegure estabilidad. Además, la micropipeta debe caber en la mano y ser funcional para usuarios zurdos o diestros. Asimismo, el diseño debería contar con una empuñadura suave para prevenir la tendinitis y otros trastornos.
¿Cómo pipetear correctamente con una micropipeta?
Para disminuir el margen de error en el laboratorio, es útil consultar guías prácticas para el uso de pipetas y seguir las instrucciones del manual de micropipeta incluido con el producto. También es conveniente tener nociones básicas de cómo pipetear correctamente con micropipeta:
- Nunca girar el dial indicador de volumen más allá del límite superior o inferior de la micropipeta.
- Las puntas son una de las partes más importantes de la micropipeta, es necesario asegurarse de que sean del tamaño correcto y estén siempre estériles.
- El pipeteo es más preciso cuando el instrumento se mantiene en un ángulo de menos de 20 ̊ de verticalidad.
- Al soltar el líquido, se recomienda apoyar la punta de la micropipeta ligeramente contra el tubo de ensayo, así la tensión superficial ayuda a dispensar el contenido.
- Un error común del operador es presionar el émbolo hasta el segundo tope antes de llenar la punta de la micropipeta.
- Es importante verificar que la punta encaje con el mínimo esfuerzo y que salga con la misma facilidad; siempre es aconsejable revisar el manual de micropipeta para no cometer errores.
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