El nitrógeno es uno de los elementos más abundantes en la tierra, constituyendo alrededor del 78% de la atmósfera terrestre. En estado gaseoso es inerte, seguro y relativamente fácil de almacenar, lo que convierte a los tanques de nitrógeno en un recurso invaluable en distintos campos, especialmente en el ámbito científico y médico. En los laboratorios de patología, los tanques de nitrógeno se aplican en diversas funciones cruciales. 

Además de estas aplicaciones principales, los tanques de nitrógeno se utilizan en una serie de otros procedimientos auxiliares y técnicas de laboratorio. Sin embargo, los riesgos asociados con el manejo del nitrógeno líquido, como quemaduras por congelación y asfixia, requieren precauciones de seguridad estrictas.

Preservación de Material Biológico

Uno de los usos más comunes de los tanques de nitrógeno en los laboratorios de patología es la criopreservación, un proceso que mantienen las células y los tejidos en ultrafrio (rondando los -196°C) para preservarlos durante largos periodos de tiempo. A esta temperatura, todas las actividades metabólicas se detienen, lo que permite una longitud de vida casi indefinida de células en suspensión y tejidos.

Los tanques de nitrógeno son esenciales para conservar muestras de sangre, orina, saliva, tejidos y otros biomateriales por largos periodos sin sufrir descomposición o crecimientos bacterianos. Igualmente, estos tanques también son críticos para el almacenamiento de muestras de tejido canceroso, que ayudan a los científicos a investigar y desarrollar nuevas terapias y curas para diversas enfermedades.

Crio-elección 

La crio-elección es un proceso empleado en la histología, un área de la patología que se ocupa del estudio de la estructura microscópica de los tejidos. Este proceso implica congelar rápidamente una muestra de tejido y luego cortarla en rodajas ultrafinas utilizando un criomicrotomo. El nitrógeno líquido almacenado en los tanques es esencial en este proceso para congelar la muestra instantáneamente y mantenerla a una temperatura constante durante el corte.

Este procedimiento es vital para preservar la estructura del tejido y sus componentes bioquímicos, permitiendo un examen detallado de su anatomía y patología, y brindando valiosa información para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades.

Refrigeración de Instrumentos y Equipos

Los tanques de nitrógeno también son cruciales para la refrigeración de instrumentos y equipos. En ciertos procedimientos, como la cirugía ocular con láser o microscopía electrónica, los instrumentos deben mantenerse a temperaturas extremadamente bajas para prevenir el sobrecalentamiento y garantizar un rendimiento óptimo. 

El nitrógeno líquido es perfecto para este propósito, ya que puede absorber grandes cantidades de calor y tiene una temperatura de ebullición muy baja. A pesar de estos desafíos, el nitrógeno ha demostrado ser una herramienta excepcionalmente valiosa en los laboratorios de patología, jugando un papel fundamental en el avance y la innovación constantes en el campo médico.

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